Esto escribimos en su día a l@s habitantes de Laciana (antes de pasar a ser nosotr@s mism@s habitantes de este maravilloso e injustamente maltratado valle):
A todos los lacianiegos y lacianiegas,
Os escribimos desde la organización de la acampada SOS Laciana, pidiendo disculpas por no haberlo hecho con anterioridad, pues creemos que vosotros sois los primeros en conocer las razones de este evento.
El día 26 de agosto comenzarán a llegar a Sosas personas de todas las partes de España y permanecerán allí hasta el 5 de septiembre.
Es muy importante para nosotros que sepáis quiénes somos y qué venimos a hacer.
Somos parte del movimiento 15 M, gente muy diferente, de distinta procedencia y clase social, pero con algo muy grande en común: que estamos indignados. Por no poder conseguir un puesto de trabajo, por las precarias condiciones que tenemos, por las inalcanzables sumas de las hipotecas que nos impiden hacer uso de nuestro derecho a una vivienda digna, por la privatización de la sanidad, por la vinculación de la educación a los intereses de las corporaciones … Estamos hartas de la corrupción, que los políticos se embolsen el dinero que es de todos mientras dan rienda suelta a los recortes sociales, que el interés de los empresarios como Victorino Alonso primen por encima del de la gente, del silencio de los sindicatos…
Y con este enfado, hemos salido a la calle y hemos acampado en las plazas de nuestras ciudades y pueblos para decir un: basta ya!, hemos empezado a organizarnos, llevamos ya varios meses reuniéndonos para encontrar la forma de cambiar esta situación. En este tiempo nos hemos visto las caras, se han ido sumando más y más personas, nos hemos dado cuenta de que somos muchos y también de que, si alguien va a provocar ese cambio, vamos a ser nosotros, el pueblo. Por eso hemos decidido trabajar sin partidos, instituciones o empresas de ningún tipo ni constituirnos como tales.
Sabemos que la mayoría de los habitantes del Valle compartís muchos de los problemas que se están visibilizando en el movimiento: la precariedad del trabajo en las explotaciones a cielo abierto, la falta de medidas de seguridad, la inestabilidad laboral, los EREs, los despidos, el chantaje del impago de los sueldos, la introducción por parte del empresariado de más y más máquinas que hace que se reduzcan los puestos de trabajo. Conocemos vuestra historia de lucha minera, en la que habéis peleado firmemente por vuestros derechos, aquéllos que ahora se os están arrebatando.
También llegó a nuestros oídos que las ayudas que recibe el valle para la reconversión minera, los fondos MINER, no llegan a la gente ni se concretan en proyectos útiles que reactiven la economía de la zona. Y con vosotros, nos preguntamos, ¿dónde queda ese dinero?
Sabemos que también estáis indignados.
Hemos visitado Laciana, hemos apreciado la increíble naturaleza que se desborda en sus montañas, la vida que rebosa en cada bosque. Allí aprendimos lo que era una braña y lo que significa para la gente del lugar y para la cultura y tradición lacianiega, la importancia de los vaqueiros de alzada, que con el manejo de sus vacas han dado forma a este hermoso paisaje.
Con la firma del Decreto del Carbón, se otorga desde la Administración un plazo de 7 años para seguir explotando la zona. Según ese mismo Decreto, las subvenciones van a ir decreciendo hasta que al final sólo puedan mantenerse las empresas cuya actividad sea económicamente rentable para funcionar sin dinero público. Desde hace años se sabe en la zona que eso supondrá el fin del carbón. En ese corto periodo de tiempo, el valle se puede dañar terriblemente. Se llevarían a cabo 5 proyectos de mina a cielo abierto, desapareciendo zonas de increíble valor natural. Y después ¿qué? Se está hipotecando el futuro de Laciana y el de todos sus habitantes para el beneficio de un empresario que luego marchará y dejará a los pueblos sin recursos.
Lo que pretendemos con esta acampada es encontrarnos con vosotros, que compartámos la problemática social, política y económica del valle, generar entre todos alternativas para el lugar. Por eso, os propondremos asambleas en los pueblos, espacios para reunirnos y comunicarnos.
También queremos aprender sobre vuestra cultura, las tradiciones, vuestra historia, disfrutar con vosotros de los bosques y las montañas que os han visto crecer. Estamos abiertos, a su vez, a todas las propuestas que se os ocurran.
Nos despedimos por ahora, esperando el momento de veros.
[ Del 26 de Agosto al 6 de Septiembre ]
