El Principado exige un severo nivel de protección en la zona para poder reabrir la explotación

A Coto Minero de Lena no le resultará nada fácil superar el trámite medioambiental y reabrir Mina Julita, una antigua explotación de carbón siderúrgico ubicada en el alto de La Cobertoria, en el concejo de Lena, en una zona de especial valor paisajísticos y faunístico.

De momento, la consejería de Fomento considera que el proyecto, ahora mismo, presenta un alto impacto ambiental. En la resolución en la que la consejería se pronuncia sobre el alcance de las repercusiones medioambientales de esta explotación minera, alude a la necesidad de que la empresa cumpla una serie de requisitos para minimizar el impacto sobre sobre la fauna (el oso y el urogayo), especies amenazadas, la recuperación de hábitats, el patrimonio cultural, vertidos y, en general, exige un completo proyecto de restauración que minimice la explotación minera.

El Principado, según recoge ayer el BOPA, se pronuncia sobre las actuaciones que son necesarias para que se cumpla el estudio de impacto ambiental y se pueda reanudar esta explotación de carbón de hulla. Así, la resolución de la consejería define la extensión y la metodología de extracción y de restauración ambiental a seguir. Además, Fomento recoge las consultas realizadas sobre el proyecto a las administraciones afectadas, algunas de ellas muy críticas con la reapertura de la mina.

Entre los requistos que obliga a cumplir el Principado figura la obligación a Coto Minero de tener en cuenta las recomendaciones Recursos Naturales. Esta dirección general exige que las actuaciones de las explotación minera se ajusten al Plan de Recuperación del Oso Pardo, a la vez que pide evitar afecciones con el urogallo, al ser el territorio donde se ubica la mina una zona de distribución de esta ave protegida.

También la Dirección General de Ordenación Agraria y Forestal recuerda que, en marzo de 2007, informó en contra de una solicitud de explotación de estas mismas capas, por lo que recomienda un cambio en el expediente si se quiere reabrir de nuevo la mina.

Asimismo, el promotor de Mina Julita debe tener en cuenta los reparos del Ayuntamiento de Lena al proyecto minero. El consistorio considera que hay aspectos del “manejo medioambiental de la explotación que están insuficientemente tratados”.

Entre las recomendaciones medioambientales que recoge Fomento se encuentra la petición para realizar un estudio del sistema de aguas subterráneas y de las posibles afecciones sobre los acuíferos y fuentes existentes en el entorno. Así como mejorar el sistema de tratamiento de aguas, “de manera que en el punto de vertido no se sobrepasen los niveles de emisión reglados”.

Por otra parte, recomienda hacer un estudio sobre el paisaje, con el fin de aminorar el impacto visual de la explotación y aplicar medidas correctoras del método de explotación .

Igualmente, Fomento exige a Coto Minero un proyecto de restauración. Un plan que incluya medidas compensatorias a la actividad minera en La Cobertoria, tales como plantaciones, pasos de fauna, recuperación de hábitats, etc.

Finalmente, el proyecto tendrá luz verde si evita las afecciones al patrimonio cultural, presenta un inventario ambiental e incluye medidas corrrectoras ante la incidencia acústica que puede tener la explotación sobre viviendas y pueblos de la zona. Sin olvidar recomendar un estudio para construir un acceso desde la carretera AS-230 a la explotación y evaluar la influencia que la mina tendrá en el incremento del tráfico en la zona de la Cobertoria.

Una vez que el promotor presente el proyecto incluyendo estas recomendaciones medioambientales, deberá presentarse durante un periodo a información pública. A continuación, la Comisión de Asuntos Medioambientales de la consejería de Fomento emitirá, finalmente, la declaración de impacto ambiental del proyecto, que puede ser positiva (con o sin condiciones) o negativa. Así se pondrá fin a la tramitación ambiental, previa a la reapertura